El resto de ingredientes no eran muchos, así que no perdía nada haciéndola y ver que salía de todo eso.
Escogí un molde de los grandes (mejor que sobre que no que falte) y preparé una rejilla. Este tipo de tarta hay que dejarla enfriar boca abajo nada más sacarla del horno, y tiene que tener circulación de aire, por lo que con esto haría el apaño. La decoración es bastante sencilla, ya que recomiendan comerla tal cual o espolvorearle un poco de azúcar glas o ponerle ganache de chocolate. Esto ya es a gusto del consumidor. Yo opté por ponerle chocolate derretido con unas fresas.
El resultado fue una tarta muy esponjosa y suave, con un ligero sabor a chocolate. A la gente le ha encantado y encima al ser una tarta baja en calorías, en comparación con las recetas habituales, desapareció más rápido que de costumbre. Vamos, que fue un visto y no visto, tanto en casa como en el "trabajo". Me parece que me la pedirán más veces a partir de ahora.
Ingredientes
El resultado fue una tarta muy esponjosa y suave, con un ligero sabor a chocolate. A la gente le ha encantado y encima al ser una tarta baja en calorías, en comparación con las recetas habituales, desapareció más rápido que de costumbre. Vamos, que fue un visto y no visto, tanto en casa como en el "trabajo". Me parece que me la pedirán más veces a partir de ahora.
Ingredientes
- 16 claras de huevo (480 ml)
- 250 g de azúcar
- 160 g de azúcar glas
- 145 g de harina
- 25 g de maizena
- Una pizca de sal
- Una cucharadita colmada de cremor tártaro
- 20 g de cacao en polvo
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Precalentamos el horno a 170º y preparamos un molde grande. No se engrasa, así que si no es desmontable, podemos ponerle papel de horno en la base para facilitar la tarea a la hora de sacarla.
Preparamos las claras previamente para que estén a temperatura ambiente, tapando el recipiente con papel film, durante una media hora como mínimo.
Mezclamos el azúcar glas, la harina, maizena y el cacao y tamizamos todo dos veces. Reservamos.
En un recipiente grande, batimos las claras hasta que espumen, añadimos la sal y el cremor tártaro y seguimos batiendo hasta que forme picos suaves. En este punto podemos empezar a echar el azúcar poco a poco mientras vamos batiendo.
Añadimos la esencia de vainilla. Batimos hasta que estén totalmente montadas, cuando veamos que los picos que se forman no se caen.
Incorporamos la mezcla de harina, poco a poco, con una espátula y movimientos envolventes, para evitar que se bajen en exceso.
Cuando esté bien integrado, lo vertemos en el molde. Pasamos la espátula por encima para nivelarla y quitar las burbujitas y horneamos durante 40 minutos o hasta que veamos que está firme al tocarla o que al pincharla con un palillo salga limpio.
La sacamos del horno y la colocamos boca abajo sobre la rejilla hasta que esté completamente fría. Si tenéis un molde con parte central, podéis ponerlo sobre una taza.
Más adelante haré la versión sin gluten, y editaré la entrada para añadir las especificaciones oportunas. Mi pobre hermana la miraba con ojos golosos, pero no podía catarla, así que la próxima vez será.
Celiacos
Se puede realizar la misma receta con la harina mix dolci.
Además añadí una cucharadita de goma xantana, ya que llevo tiempo viendo que la utilizan mucho para repostería sin gluten. La próxima vez prescindiré de ella a ver que tal sale.
Tanto la textura como el sabor son iguales a la receta original. Lo único es que se me ha hundido un poco, aunque no puedo asegurar que no fuese error mio debido a estar más tiempo del recomendado mezclando los ingredientes.
Como siempre, comprobar que la vainilla no contiene gluten. Yo utilizo vainilla Vahiné.
Nota: En el segundo intento prescindí de la goma xantana y quedó no solo igual de buena, sino que no se hundió nada.
no había visto nunca tu blog, me encanta!!! Me suscribo ya mismooo!!!
ResponderEliminarGracias!!! y bienvenida ^^
EliminarAquí la catadora oficial de todo lo sin gluten "made in Catcakes" . Ésta tarta está muy buena, es ligera, esponjosa y elástica, nada que ver con las texturas arenosas más típicas de los bizcochos para celíacos a los que estamos acostumbrados. Y a diferencia de la Extreme chocolate, que está perfecta los dos primeros días pero después empieza a secarse y transmutar a arenosa, esta mantiene su textura intacta. Muy recomendable para olvidarnos de que estamos comiendo algo sin gluten y que, además, encantará también a los no celíacos, porque ni se darán cuenta de que es un bizcocho apto!!! Saludos compañeros enemigos del gluten!!!
ResponderEliminarQue rico! Me encanta el Angel Food Cake y me alegro que hayas puesto esta receta sin gluten! Por cierto, ?que tipo de harina sin gluten usaste?
ResponderEliminarharina mix dolci de Schar ;-)
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