No es que no haya tenido tiempo de probar alguna receta nueva, lo hice, pero no me ha terminado de convencer. Hice unos cupcakes de limón que estaban buenos, pero no espectaculares. Así que esperaré a dar con otra receta que tenga ese algo especial que te hace comerte uno detrás de otro.
Además esta semana he hecho dos tartas fondant, más una de naranja con lemon curd para un amigo. Así que no he tenido mucho tiempo para más. Eso sí, la mezcladora está demostrando su valía. No le doy tregua.
Para el fondant recomiendan utilizar bizcochos duritos, consistentes, con miga prieta para poder recortarlo con facilidad. Pues no, yo me lanzo a hacer una que se desmiga, se pega a las manos al cogerla... Todo por poder saborear este pedazo de tarta de chocolate una vez más.
¿Añadimos punto de dificultad? Es la tercera tarta que hago, por lo que solo he tenido experiencia con temperaturas invernales y encima esta se me ocurrió no refirgerarla antes de colocar el fondant.
Otro punto extra de dificultad fue quitarle 100 g de azúcar glas al frosting de chocolate, para que no fuese tan dulce. Es decir, tenía menos consistencia de lo normal.
El resultado de todo esto fue que el chocolate se empezó a escurrir por debajo del fondant según la iba cubriendo y veía como se abombaba por algunas partes de los laterales. Casi me da un patatús. Afortunadamente conseguí apañarla sin terminar lanzandola por la ventana de la desesperación.
Esta tarta la hice para el cumpleaños de un amigo, al que íbamos a asistir casi 30 personas.
Para el que no sea tan friki como yo y no sepa de que es la tarta, es de la serie Battlestar Galactica. Es el logo de la serie con las naves cylon, osea los "malos", al rededor.
No parecía muy complicada de hacer (ilusa de mi), pero al final me tiré todo un día decorándola. Y porque mi hermana me ayudó con las letras y la nave grande, que hacer eso a mano me habría costado esa noche de no dormir para conseguir llegar a tiempo.
Esta otra tarta la hice para el cumpleaños de un niño al que le gusta mucho Doraemon. Más pequeña que la anterior (unos 20 cm) y también de chocolate extremo. Aunque esta vez la refrigeré después de cubrirla, para evitar pasar el sofoco que pasé con la anterior.
El único problema en esta fue el fondant, que puede que no le haya pillado del todo el truco, pero esta marca en concreto se agrieta hasta cuando estás modelando, cosa que nunca antes me había pasado.
He vuelto a comprar Funcakes y a ver que tal sale la próxima. Creo que tendré que ponerme a practicar sobre los dummies que compré, porque veo que la próxima va a ser una de boda y esa tiene que quedar perfecta perfecta.
Os dejo ya, que tengo que ver qué decoro hoy en lo que pueda estrenar mi pistolita de sugarcraft que compré ayer en Vainilla y Caramelo. Ni he dormido hoy pensando en que voy a hacer, en serio, me he despertado a las 6 de la mañana de un sábado. Tiene delito ^^'
Impresionantes, realmente te han quedado las dos preciosas, el Doraemon lo has bordado pero la tarta de BG...es bestial!! Felicidades!!!
ResponderEliminarGracias!!!! La verdad es que me estreso un poco cuando toca cubrir la tarta pero luego me encanta decorarlas. Y más si son frikadas ^^
EliminarMe encanta la de doraemon!!!! Es preciosa!!!
ResponderEliminarGracias!! *^^*
EliminarQuedaron geniales las dos! Felicitaciones!
ResponderEliminarTe espero en mi blog!
Un beso,
Macarena
Gracias! ^^
Eliminarte quedaron increibles!!
ResponderEliminarBesos
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